¿Por qué usar el término del ‘toma y daca’ para abordar el tema de la ‘Mañanera de hoy’ que ofrece el presidente Andrés Manuel López Obrador desde Palacio Nacional? Se usa porque significa el intercambio de cosas que se oponen, como respuesta unas de otras. 

Es decir, AMLO responde cada mañana lo que los oponentes políticos de su transformación le lanzan desde cualquier trinchera mediática, pero no solo eso, en la medida que atacan a su gobierno responde y le aclara -a su modo- a la sociedad los temas para que no haya dudas y cada quién norme su criterio. 

Así, la Mañanera de hoy fue de un “estate quieto Felipe”. AMLO enfocó sus baterías en sacarle todos los trapitos al sol al expresidente Felipe Calderón, luego de que ayer Felipe hiciera fuertes declaraciones en sus redes sociales que fueron recogidas por famosos columnistas y articulistas con respecto a la masacre ocurrida en San José de Gracia, Michoacán. 

AMLO, para empezar, le recordó que se robó la presidencia en el 2006, “hay pruebas suficientes”, dijo; también lo acusó de matar tanto a delincuentes como a civiles para legitimar su mandato “declarando la guerra… iba vestido de militar, con una chamarra que le quedaba grande…”, en las redes sociales le hacían ver por ello a Calderón como el ‘Borolas’ de las películas. 

También, mostró un video donde Humberto Moreira lo acusa de haber dicho que prefería asesinar a los secuestradores y delincuentes, y para culminar le recordó su complicidad para tapar la verdad de la Guardería ABC; sin dejar de mencionar a su Secretario de Seguridad Pública, Genaro García Luna. Y para rematar, no dejó de aprovechar su espacio mediático para mostrar diferencias entre su gobierno y el de los neoliberales, así como para defender su estrategia de seguridad ¿Cómo vamos a resolver las cosas? ¿Ametrallando? Se preguntó AMLO al tiempo de lamentar las burlas por la política de abrazos no balazos y reiteró que están atendiendo las causas que desatan la inseguridad. 

Y tozudo como es AMLO, no dejó de anunciar que mañana darán a conocer una nueva lista de evasores fiscales incluyendo a medios de comunicación y pidió a los periodistas presentes levantar la mano para autorizarle o no a presentar los recibos del salario de Carlos Loret de Mola, “de una vez, también”, señaló. 

Así, la política mediática del país se ha convertido en tu verdad contra la mía en un ejercicio de ‘toma y daca’ en la que no se da cuartel.