En los cafés de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, desde donde las campañas negras repletas de odio, rencores y pasiones se han desprendido y llenado las páginas de diarios nacionales y redes sociales, los sabios bebedores del mejor aromático del mundo -el de Veracruz- se quejan de que se abarató el análisis político fino y se cayó en lo corriente y generadores de vulgares Fake News.
Lo anterior a falta de imaginación y sentido de responsabilidad.
Las preguntas son:
¿Qué pasará al final de las campañas?
¿Hasta dónde estarán dispuestos a llegar los protagonistas de las campañas negras por un hueso en el gobierno o los negocios que llegarán por añadidura si logra ganar para quien hoy trabajan?
¿Llegarán a las manos o a las armas?
¿Llegarán a extremos como ha sucedido en otros lugares donde habrá elecciones en junio o más recientemente en Celaya?
No, definitivamente la política se hizo corriente y vulgar.
Así que los canillazos de esta mañana se los han ganado aquellos políticos que atacan entre las sombras, tiran la piedra y esconden la mano.