Que nadie se confié, aun no se gana nada, absolutamente nada. Esa debería de ser la frase favorita de quienes hoy están trabajando en la construcción del frente amplio opositor en Veracruz. Y es que lanzar las campanas al vuelo como lo han hecho muchos a lo largo de estos días diciendo que todo está resuelto o casi resuelto en favor del todavía diputado federal por el distrito de Coatepec José Yunes Zorrilla es verdaderamente un despropósito, inclusive un insulto a la inteligencia de los propios ciudadanos que ya no se dejan engañar con nada ni por nadie.
La competencia todavía está lejos de definirse. Faltan 6 largos meses que deberán de ser llevados con mucho cuidado y sobre todo con un alto nivel de tacto político. Y para ello sin lugar a dudas Pepe tiene que tomar las riendas de la coordinación de campaña y observar con lupa cada movimiento que se haga y desde luego la incorporación de los personajes que lo acompañaran en este larguísimo camino rumbo a la gubernatura del próximo año. Eso será fundamental.
Morena sin lugar a dudas ha bajado en un alto nivel sus números positivos que los colocaba hasta hace unos meses como favoritos en la contienda, prácticamente sin rival enfrente. Hoy las cosas son distintas y la propia inercia del final de este pésimo sexenio y la figura tan desgastada y poco popular de Cuitláhuac García Jiménez están cambiando la perspectiva de quien podría llevarse el triunfo el próximo año. Cuitláhuac lejos de abonar en positivo lo hace completamente en negativo, y en el bunker morenista lo saben y lo tienen más que claro.
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