Luego de nueve años de bajas y rebajas en el PIB, el crecimiento global va camino de superar las expectativas. Estados Unidos y Europa sobrepasan los pronósticos.

Lo anterior quizá le parezca ocioso, pero resulta de fundamental importancia por el hecho de que no en pocos países del mundo el arribo y triunfo de candidatos populistas es cosa cantada. 

La pregunta es ¿Llegará la mejoría de las economías antes de que ello suceda? O, como se pregunta Kenneth Rogoff, ex economista principal del Fondo Monetario Internacional, y profesor de Economía y Políticas Públicas en la Universidad de Harvard, ¿logrará la recuperación detener el avance de líderes que insisten en proponer soluciones seductoramente simples para problemas realmente complejos?

Kennet Rogoff, publicó este fin de semana en un análisis titulado “A vueltas con el populismo”, que “La amenaza al globalismo parece haber dimitido en Europa tras las derrotas electorales de los candidatos populistas en Austria, Países Bajos y ahora Alemania. Pero un giro populista en las elecciones en Francia o Italia todavía puede bastar para desintegrar la Unión Europea y causar un daño colateral inmenso al resto del mundo.

“La candidata presidencial francesa Marine Le Pen, dice Kenneth, quiere aniquilar la Comunidad Económica Europea y el Euro, porque, según dice, “el pueblo de Europa ya no la quiere”. Y si bien las encuestas de opinión auguran una victoria contundente del candidato europeísta Emmanuel Macron sobre Le Pen en la segunda vuelta prevista para el 7 de mayo, el resultado de una competición entre dos candidatos es siempre difícil de predecir, especialmente con el apoyo del presidente ruso, Vladímir Putin, a Le Pen. Dada la volatilidad de un electorado descontento y la capacidad comprobada de Rusia para manipular las noticias y las redes sociales, sería arriesgado pensar que Macron está ya elegido con toda seguridad”.

“Para la elección, afirma Kenneth, en Italia todavía falta un año, pero la situación allí es aún peor. El candidato populista Beppe Grillo lidera las encuestas, y se prevé que consiga más o menos un tercio del voto popular. Como Le Pen, Grillo quiere acabar con el euro. Resulta difícil imaginar un hecho más caótico para la economía global, pero tampoco es fácil ver una salida para Italia, donde la renta per cápita se ha reducido ligeramente desde la llegada de la moneda única. Con un crecimiento poblacional empantanado y una deuda cada vez mayor (más del 140% del PIB), el futuro económico de Italia se ve sombrío. Pese a que entre los economistas la opinión mayoritaria sigue siendo que abandonar el euro sería profundamente autodestructivo, hay cada vez más convencidos de que la moneda común no sirve para Italia, y que cuanto antes la deje, mejor”.

Finalmente Kenneth se pregunta sobre el futuro de los países con economías de mercado emergentes que actualmente luchan contra sus propios populistas como Polonia, Hungría y Turquía, (Venezuela, Brasil).

No se sabe si llegará antes el crecimiento económico cómo México cuyo partido en el poder arrastra en su contra no solo la falta de crecimiento económico –las reformas de gran calado no logran aún cuajar-, sino por la estela de corrupción de ex gobernadores, ex alcaldes y ex presidentes de la república, pero sobre todo, las dudas hacia la transparencia y honestidad de la actual familia que se hospeda en Los Pinos. 

Por lo anterior, México tiene hasta ahora un saldo demasiado negativo que se podría medir por el abrumador crecimiento electoral del candidato de MORENA, Andrés Manuel López Obrador, rumbo a la Presidencia en el 2018.

La detención del exgobernador Javier Duarte de Ochoa se vio rápidamente empañada electoralmente por la “graciosa huida” de su esposa, hijos y familiares hacia Europa. Otros factores de peso en la mente de los votantes mexicanos son por ejemplo: la tardanza en las actuaciones en contra de otro grupo de ex gobernadores señalados de corrupción; los sobornos de Odebreth que no se aclaran del todo; la “Casita Blanca” de Angélica Rivera; la “Casita” del actual titular de Relaciones Exteriores en Malinalco; la “Casita” que el presidente Peña Nieto “adquirió” de un famoso contratista inmobiliario y contratista de lujo de los gobiernos de Peña Nieto; las desapariciones de jóvenes en Ayotzinapa; la inseguridad general por todo el país; etc. 

Todo ello, aunado a la falta de crecimiento y empleos, hace ver con pesimismo que aún con algún posible crecimiento se logre frenar a la buena al candidato de MORENA. 

Aunque Usted lo dude, así van las cosas en el mundo y en México.