Además de que su partido el PRI, llega debilitado, en el inicio del proceso electoral del 2018, cuando se dará la sucesión presidencial. Actualmente el PRI según Consulta Mitofsky, una de las encuestadoras más importantes del país, tiene al PRI, en tercer lugar rumbo a la elección presidencial, sea cual sea el candidato que pongan.
Una crisis natural de final de sexenio, pero que golpea no solo al presidente, si no a su partido y al candidato presidencial que resulte de las filas del tricolor.
Enrique Peña Nieto, aunque en este mes, subió en aceptación de los mexicanos, subió 5 puntos pero desde los niveles más bajos que había tenido desde que llego a su gobierno.
Este año fue sin duda uno de los más críticos de toda la administración, en el mes de enero por ejemplo su imagen cayo de forma brutal, por el tema del gasolinazo, después el precio del peso frente al dólar, la llegada de Donald Trump al gobierno de Estados Unidos, y la crisis diplomática con ese país, por el tema del muro entre las fronteras de ambos países, terminó por tirar al piso la imagen presidencial.
En este V informe de gobierno, a pesar de que en México siempre ha sido fundamental el tema económico, y crecimiento en la materia, en este informe el presidente debe de preponderar los temas de seguridad nacional, ligados al narcotráfico y la lucha contra el crimen, que es lo que preocupa a todos los mexicanos, de igual forma que el tema de la corrupción que es de los más reclamados por los ciudadanos.
El efecto político que dejo el caso del ex gobernador de Veracruz Javier Duarte también tuvo este año un costo político para el presidente Enrique Peña Nieto y su partido en todo el país, que se reflejó en los resultados de las pasadas elecciones y amenaza con desplomar al tricolor en las encuestas rumbo a las próximas elecciones presidenciales.
Es cierto que no se puede descartar que el PRI, pueda mantener la presidencia de la República el próximo año, dado que el tricolor gobierna en el 60 % de la población en México. Es un partido grande que no va a desaparecer y que si puede ganar a pesar de las circunstancias que hoy lo colocan en tercer lugar.
Ahora el reto que tendrá el presidente de la Republica es sin duda subir en la aceptación de los mexicanos, para ello tendrá que ofrecer la solución a los problemas de seguridad y corrupción.
Y en el último tramo de su gobierno elegir al quien será el candidato del tricolor, y hacerlo crecer para que llegue a sucederlo.
Vencer al gigante electoral en el que se ha convertido el partido Morena, y debilitar al PAN que está en segundo lugar en las encuestas. |
