Y es que el dirigente de morena, furibundo por perder otra posición en el Congreso, señaló a la legisladora de cohecho, entrega de premios, bonos, y “moche”, a lo que respondió, que si Huerta acusa está obligado a probarlo, “es fácil llenarse la boca de mentiras y escupir basura a diestra y siniestra, hoy él hace señalamientos sin bases, sin pruebas, y presume honradez y yo les digo, dime de que presumes y te diré de que careces”.
Pero la diputada Gonzalez Sheridan fue más allá, se le fue a la yugular a Manuel Huerta, diciendo que el estilo del dirigente, es el de un fascista y que asume actitudes dictatoriales.
Por lo pronto parece que morena no tiene empaque para enfrentar las elecciones de 2018.
Están divididos internamente y quién sabe si el liderazgo de López Obrador les alcance para repetir triunfos como los de la elección pasada, toda vez que, no únicamente no dan resultados, sino que además entre ellos se hacen pedazos.
Un ejemplo más de violencia política y de género.
PLEITO EN EL NORTE
Los que andan de la greña en el norte, son el diputado por Tuxpan, Arturo Esquitín y la alcaldesa electa de Tamiahua, Citlali Medellín Careaga.
El tema: Transcanada y el gasoducto.
Tanto, que ha habido rumores de que no la dejarán tomar posesión, por ir en contra de la postura del diputado, quien le dijo a pescadores de la región, que la alcaldesa electa no es su aliada y que tendrá que entender que hay niveles.
La alcaldesa denunció al diputado ante la CONAVIM por amenazas.
Ya interviene en el diferendo el Secretario de Gobierno, Rogelio Franco Castán.
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