El odio político y el rencor contra los Yunes del Estero no es solo local, sino también nacional. 

Para los de MORENA es un agravio; para el Movimiento Ciudadano es motivo de publicidad para su movimiento; para los veracruzanos, un hastío.

Y es que el tema en contra de los Yunes no es tan solo por el voto negociado a favor de la Reforma al Poder Judicial que hizo el senador Miguel Ángel Yunes Márquez, sino sobre todo que los presuntos delitos administrativos y otros mayores por los que ha sido señalado mediáticamente Miguel Ángel Yunes Linares, nunca han sido aclarados en tribunales. 

Por ello, MORENA no puede digerir la afiliación del Senador, ni le agradecen que su voto haya sido el fiel de la balanza para sanear al Poder Judicial de la presunta corrupción de que se le acusa públicamente. 

Lo anterior lo resume muy bien el periodista Pablo Jair Ortega en su “Columna sin nombre” de esta manera:

“Este lunes, simpatizantes de Morena increparon al presidente del Consejo Nacional de Morena, Alfonso Durazo (también gobernador de Sonora), a su salida de Palacio Nacional, para protestar en contra de la afiliación del senador ex panista Miguel Ángel Yunes Márquez... Fuera prianistas. Gobernador haga algo, no queremos a los Yunes, no queremos que nos representen lacras”, fue de los gritos que se escucharon, mientras Durazo intentaba dar una entrevista a medios de comunicación”. 

En verdad que muy cara le ha salido la adhesión de los Yunes del Estero al movimiento de la 4T en el Senado y su ulterior afiliació a MORENA… ¡Puro  dolor de cabeza a la dirigencia nacional!