Se ha dicho aquí, y muchas veces, que los candidatos a la alcaldía de Xalapa han utilizado el problema del agua como bandera política pero no llegan al fondo del mismo ni se atreven a decir de frente la verdad.

“El problema del agua en Xalapa no es la falta de la misma, lo es la pésima administración”, sostienen los integrantes del colectivo “Guardianes del Agua Xalapa”.

Y tienen mucha razón.

Lo que todos saben y critican: personal excesivo, grosero, prepotente y que sus métodos y cuadrillas de trabajo dan risa: ¡Uno abre y tapa el hoyo… y los demás ven! La mayoría de inspectores coaccionan, amenazan y chantajean.

Cobros excesivos e inexplicables: Se paga por agua que no llega, en ocasiones te cobran aire por agua. Cobran por un supuesto saneamiento cuando ni drenaje tienen algunos usuarios. El costo de contratación es carísimo. Y lo peor, se paga por agua potable cuando en realidad no lo es, es decir: CMAS engaña, roba defrauda, miente.

Y como para que le tiente el agua a los camotes, le comento que el colectivo “Guardianes del Agua Xalapa” no está compuesto por charlatanes ni oportunistas políticos, de esos que solo sacan la cabeza en campañas políticas. ¡No! Lo integran personas preparadas, conocedoras del tema y que además se han pasado la vida proponiendo soluciones y señalando los errores que se cometen con el vital líquido en la capital del Estado.

El colectivo lo integran personas de la sociedad civil y académicos, entre ellos Gerardo Alatorre Frenk, investigador de tiempo completo de la Universidad Veracruzana.

Y es que tal vez a quienes tienen dinero y sólo pagan sus recibos sin ver y en línea, no les importa lo que pasa en las oficinas donde se administra el agua (CMAS). Ahí desde la cabeza hasta los pies lo que les sobra es la prepotencia, la falta de empatía con los usuarios que se atreven a reclamar, la bola de ‘coyotes’ que pululan, ‘que todo te resuelven por una corta’, cuyos empleados se la pasan viendo el celular, comiendo cuantos antojitos venden en el interior. Gente insensible ante el dolor ajeno a los que la seguridad que les da el inmenso poder sindical les da poder sobre la sociedad y pasan por encima de las autoridades municipales.

¡Toda una mafia!

A eso se refieren los del colectivo, pero de eso no se atreven a hablar ni a comprometerse los candidatos que conocen el poder sindical que tendrán sobre sus espaldas y perderán votos si lo hacen.

Si a voz alzada, como acostumbran los morenos, preguntaran a los xalapeños: ¿Quiénes son los empleados municipales más odiados y despreciados en la ciudad? La respuesta sería: ¡Los de CMAS!

Pero mejor ni seguirle porque si los candidatos a la presidencia por Xalapa no se han pronunciado aún por esos problemas de fondo, tampoco lo harán en los pocos días que faltan. 

Así que prepárese porque los xalapeños seguiremos teniendo el yugo en el cogote llegue quien llegue a la presidencia municipal.

Quizá los únicos candidatos que han dejado ver que conocen el problema de fondo y lo intentarán resolver son Daniela Griego Ceballos, quien sí pudo con el IPE y tal vez lo pueda hacer con CMAS; y Silvio Lagos Galindo, el ‘Macho Alfa’ del PRI, que de llegar a la presidencia quizá quiera hacer algo más allá de lo político para que su partido recupere el terreno perdido en la Capital. Los demás ni idea tienen de la realidad que aquí se ha señalado. Andan por las nubes.

¡Al tiempo!

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(COLUMNA "FIGURAS Y FIGURONES")