Lo que comenzó como una sátira musical del pop ochentero, terminó por consolidarse como un fenómeno cultural en México. Mentiras, el musical, escrito por José Manuel López Velarde, se estrenó en 2009 sin saber que se convertiría en una de las obras más longevas del país. Hoy, 16 años después y con más de 3,000 funciones ininterrumpidas, la historia da un nuevo giro: se convierte en serie de streaming.

El salto al formato audiovisual no es menor. La producción, dirigida por Gabriel Ripstein (hijo del legendario Arturo Ripstein), mezcla el drama teatral con una narrativa más íntima y visualmente atractiva. La serie no solo busca capitalizar la nostalgia de los fans originales, sino también conectar con nuevas generaciones que descubren en los 80 una época de excesos, baladas y pasiones desbordadas.

Aquí te dejamos cinco datos clave que explican por qué Mentiras no es solo un musical, sino un fenómeno que sigue evolucionando:

5 datos para entender el fenómeno "Mentiras"

1. Un musical con historia (y récords)
   Desde su estreno, Mentiras rompió esquemas. Fue el primer musical mexicano en alcanzar más de 3,000 funciones continuas, ganándose un lugar en la memoria colectiva. La obra es una carta de amor (y parodia) a las canciones de artistas como Yuri, Dulce, Daniela Romo y Lupita D’Alessio. El guión, cargado de ironía y guiños a las telenovelas, conquistó al público desde el primer acto.


2. De las tablas a la pantalla, con seis años de espera
   La serie tardó seis años en concretarse. El proyecto estuvo en desarrollo desde mediados de la década pasada, y enfrentó varios obstáculos hasta que finalmente llegó a Prime Video. El director Gabriel Ripstein, ganador en el Festival de Berlín, aportó una mirada fresca sin perder la esencia del original.


3. Un elenco que fusiona generaciones
   La adaptación a serie trajo consigo un reparto estelar que une nostalgia y actualidad: Belinda como Daniela, Regina Blandón como Yuri, Mariana Treviño como Lupita, Diana Bovio como Dulce y Luis Gerardo Méndez como Emmanuel. La química entre los actores permite explorar más a fondo las motivaciones, pasados y contradicciones de sus personajes.


4. La música sigue siendo el alma de la historia
   Las canciones que hicieron famoso al musical siguen presentes, aunque ahora con arreglos renovados. "Maldita primavera", "Él me mintió", "Detrás de mi ventana" o "Tiempos mejores" suenan en nuevas versiones adaptadas al lenguaje de la serie, pero mantienen su poder evocador.


5. Más que homenaje: crítica y sátira al amor romántico
   Mentiras no solo rinde tributo a la música ochentera, también reflexiona sobre los modelos de amor heredados de la televisión y la cultura popular. El guión juega con los estereotipos de los melodramas, mientras el diseño de producción y vestuario, a cargo de Ana Velia López, recrea con precisión la estética de la época, desde los peinados altos hasta los trajes con hombreras.

Con esta nueva etapa, Mentiras demuestra que un musical mexicano puede trascender generaciones, formatos y escenarios. Ya sea en teatro o en pantalla, la historia sigue gritando (entre canciones y lágrimas): "¡Él me mintió!"