Hay quienes ven o quieren ver que la noticia que ha corrido acerca de la detención de altos funcionarios y exjueces vinculados con el huachicol, opaca las difusiones del Primer Informe de Gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo.

Es parte de la polarización política. Ni más ni menos.

Sin embargo, el combate al huachicol fiscal -importación ilegal de combustibles que no paga impuestos- y el tradicional -el de robo de gasolinas a los ductos de PEMEX- es parte del compromiso de Sheinbaum que hoy empieza a dar resultados importantes con detenciones de altos funcionarios del Gobierno Federal. 

Quizá no se han percatado algunos que al mismo tiempo que se resalta el fuerte golpe que las autoridades mexicanas -actuales- han dado al  huachicol fiscal, se resalta también la voluntad política de Claudia Sheinbaum de frenar este lacerante problema para el país. 

Es decir, el huachicol no es nuevo, que se detenga a altos funcionarios y exjueces, sí. 

La política de Sheinbaum de que debe caer quien deba de caer, impacta también a Veracruz como bien lo describe aquí el periodista Luis Ramírez Baqueiro en su columna “Astrolabio Político” que bien titula “El derrumbe del imperio gasolinero en Veracruz”. 

En dicha columna apunta: “El golpe asestado por la SSPC a una red criminal dedicada al huachicol fiscal ha cimbrado los cimientos de una de las estructuras empresariales más poderosas y polémicas de Veracruz: la de los gasolineros”. 

Pero no se queda allí. Luis Ramírez Baqueiro da ¡Nombres! Pero no le contamos más, mejor lo invitamos a leer a Ramírez Baqueiro y su columna completa aquí.