El pasado 26 de septiembre, la presidenta Sheinbaum fue cuestionada en la mañanera respecto a las acciones que habría ejercido el SAT por los 79 millones de pesos que el senador Adán Augusto López Hernández, recibiera de empresas privadas de dudosa y cuestionable reputación y que habrían sido declarados ante el organismo con un pago casi simbólico, la presidenta de entrada exoneró al tabasqueño, declarando que hasta el momento no habría una investigación iniciada a posta del suceso y añadió que incluso el propio senador ya habría aclarado y en caso de aclarar más señaló la mandataria ¡Pues que aclare!  

Sin embargo, acotó Sheinbaum Pardo que su gobierno no encubre a nadie, ahora bien el ciudadano de a pie, ese como tu y como yo lector, lectora querida, ese paga impuestos y paga con sangre, el pasado bimestre me llegó la cuentita del SAT pasional y no sé tu, pero la devolución del ISR del ejercicio del año pasado, ya va a terminar este año y es el día que no llega, mi contador tuvo que llenar una de formatos y formularios con cuentas y cuentas y de la devolución nada… ¡Vaya! Y que conste que no es por amarrar navajas, pero hasta con los neoliberales llegaba esa devolución en tiempo y forma.

Llegará el momento en que el gobierno cuatroteista, tendrá que imponerle un correctivo al senador López Hernández y es que ingresar al SAT por concepto de impuestos  “apenas” 1 millón 900 mil pesos, como lo dijo el mismo senador, es una penosa invitación para el resto de los contribuyentes a visitar el hogar materno con la fines de incordio.

En total el senador López y ya con el jalón de orejas, pagó poquito más de 22 millones de pesos, usted o yo por mucho menos que eso, hubiéramos terminado en el mejor de los casos como Chucho el Roto en San Juan de Ulúa.

La presidenta Sheinbaum, es una mujer de ciencias egresada de la facultad de Física con estudios de doctorado en Berkeley, ha publicado numerosos artículos científicos que vinculan el uso de la energía y el cambio climático, por ello presumo será analítica y racional, al parecer no me equivoco ya que el pasado sábado en Veracruz, en el marco del aniversario de la Armada de México en su discurso, lanzó un par de frases interesantes.

Al comienzo dijo que la corrupción no puede ni debe tener cabida en las instituciones, ya encarrerada la mujer más poderosa de México preguntó ¿De qué sirve el dinero mal habido, si con él se pierde la reputación y el legado? Y como tiro de gracia concluyó ¡La corrupción no sólo destruye instituciones, sino que corroe el alma nacional y debe sancionarse! Ahora solo nos queda, esperar  que del dicho al hecho, no exista trecho.

Cosas de la vida y menudencias

El Organo de Fiscalización de doña Delia Cobos, reporta un daño patrimonial por mas de 83 millones de pesos en el Acuario de Veracruz, al que por cierto solo el señor Cuitláhuac y su grey, aún le dicen Aquiarium.

Dice doña Delia que se detectaron pagos excesivos por volúmenes de trabajos no ejecutados, trabajos de pésima calidad, costos elevados en la obra, falta de resolutivo en materia de impacto ambiental, esto es los permisos que debe entregar SEMARNAT; además existe falta de documentación comprobatoria del gasto y finiquito del gasto, entre otras importantes menudencias como la terminación deficiente en estanques, desprendimiento de los módulos de concreto y una deficiencia notoria de los trabajos realizados.

En fin, que dependiendo el Acuario de la Procuraduría del Medio Ambiente, donde despachó el tristemente célebre, Sergio Rodríguez Cortés, no se de que nos extrañamos, quizá de lo poco del monto, para los alcances del fulano ese. 

Así las cosas mi gente, arrancamos semana.

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