Si quedaban dudas de que nuestro sistema político mexicano es un desastre, basta con revisar los candidatos a diputaciones federales y locales, gubernaturas y alcaldías para este año. Entre tantos artistas, deportistas y demás celebridades registradas para competir por un cargo público se podrían hacer obras de teatro y partidos de futbol con equipos completos… Pero el problema no es tanto que aparezcan en la boleta, sino que ganen la contienda electoral, y eso es responsabilidad de quienes emitimos el voto.

Jorge Campos ‘El Brodi’, Juan Carlos Villagrán ‘Quico’, Francisca Viveros ‘Paquita la del Barrio’, son sólo algunas de las muchas celebridades que aspiran a un cargo público en los próximos comicios nacionales. Teniendo como antecedentes a Cuauhtémoc Blanco, afamado futbolista mexicano, que fue alcalde de Cuernavaca y actualmente es gobernador de Morelos, a Sergio Mayer, que pasó de ser actor y stripper a diputado federal o a Ernesto D’Alessio, que el simpe hecho de ser cantante e hijo de una reconocida artista mexicana le fueron suficientes para llegar a la Cámara de Diputados por elección popular, es preocupante pensar que esta tendencia de poner a artistas como funcionarios sea cada vez más común.

Es vital que la sociedad mexicana terminemos de entender que el hecho de que alguien sea popular o famoso no significa que esté preparado para gobernar un municipio o una entidad completa y mucho menos que tenga la capacidad de legislar en favor del progreso del país. Para eso sirven las campañas, para revisar las propuestas que los candidatos hacen para mejorar un municipio, un estado o las leyes por las que nos regimos, no para ver quién promete más cosas gratis o para medir índices de popularidad. Tan sólo la cantante ‘Paquita la del Barrio’ en su acto de precampaña admitió no saber nada de política, pero que confiaba en que sus asesores la guiarían para hacer un buen trabajo. Mientras tanto, espera cobrar mensualmente cientos de miles de pesos…

Las elecciones del próximo 6 de junio son las más importantes en la historia moderna de nuestro país, por lo que es indispensable pensar y analizar profundamente a quién le vamos a dar el poder de administrar el dinero de nuestros impuestos y con qué objetivos. No nos dejemos guiar por la popularidad, sino por la capacidad, por la experiencia y por el interés del bien común para el país.

Y tú, ¿Kime cuentas?

Sígueme en Twitter: @kimsebastian_

Facebook: @SebastianKimMx

Mándame un correo: sks.zvk@gmail.com